Me viene al pelo esta semana hablar de Rancid. Y mas aún teniendo en cuenta el artículo publicado la semana pasada en la que un servidor despotricaba solemnemente acerca de la rancia vuelta a los escenarios de Green Day. Y esque casi casi por las mismas fechas otro grupo coetáneo de los Californianos, afincados para mas inri también en Berkeley, sacaban a la luz su nuevo y esperado trabajo tras mas de seis años de Silencio. Este grupazo no es otro que Rancid, los mejores herederos que han tenido The Clash pero vamos, de largo.
Mucho ha llovido desde aquel "Indestructible" facturado en el 2003. Muchos (y buenos) han sido los proyectos paralelos en los que se han embarcado casi la totalidad de la plantilla de Rancid, y aunque sus fans, siempre agradecidos, celebrábamos cualquier atisbo de música facturado por cada uno de los componentes de esta gran banda, ya iba siendo hora de que se arrejuntaran de nuevo y nos deleitaran con un nuevo disco. Y así ha sido.
Tim Armstrong y los suyos han vuelto por sus fueros en este 2009 con "Let the Dominoes Fall" una colección de temas marca de la casa y que tanto echábamos en falta sus seguidores. Y lo bueno esque por mucho que haya cambiado la música y la industria en seis años, da gusto darse cuenta de que Rancid siguen componiendo temas de punk Rock, Ska, Hardcore y Reggae de una calidad y una factura que sólo sus admirados y reseñados en este artículo, The Clash, solían hacer.
Diecinueve canciones, diecinueve himnos todos ellos, ni una mas ni una menos, ninguna sobrante, todas necesarias son las canciones que conforman este "Let The Dominoes Fall", un disco de esos que da gusto escucharse de cabo a rabo, un disco que nos devuelve la fé en un año 2009 falto de grupos nuevos que destronen los regresos de muchas bandas como Depeche Mode, U2, o Green Day, mas pendientes estas de recaudar y hacer caja que de preocuparse por dejar el pabellón bien alto. Puede que cuantitativamente Rancid anden lejos de las millonadas que se agencian todos estos grupos, pero por otro lado, anda que no somos pocos los que agradecemos esta puesta a punto de integridad y buen hacer con la que nos han deleitado los buenos de Rancid. Al final, como su ultimo tema del disco reza, todo esto no se trata mas que de hacer "algo de música con tus amigos". Y cuando uno se sienta a hacer esto por divertimento mas que por compromiso y/o ganas de forrarse hasta las trancas, los resultados se notan. "Let The Dominoes Fall" respira naturalidad y ganas de echarse a la carretera, y no atufa a pretenciosidad y aburrimiento.